El proteccionismo familiar impide apreciar el sobrepeso en los hijos

El Instituto de Salud Infantil de Londres ha realizado una investigación sobre obesidad en el entorno familiar. Indica que la educación y el proteccionismo de los padres pueden impedir que aprecien la realidad de esta enfermedad en los niños.

La obesidad infantil es uno de los problemas de salud pública más graves del siglo XXI. Se trata de un problema mundial que avanza a un ritmo alarmante. Se calcula que hay unos 43 millones de menores de cinco años obesos o con sobrepeso. Ante esta situación, los investigadores se preguntan: ¿Cuáles son las causas?, ¿hay algún culpable? o ¿hasta qué punto afecta el entorno?

Aunque la respuesta a estas preguntas sería culpabilizar al desequilibrio existente entre la ingesta calórica y el gasto calórico, lo cierto es que la educación y el proteccionismo familiar pueden ayudar a tapar la realidad de la obesidad infantil.

Ésta es la principal conclusión de un estudio dirigido por la Escuela de Londres de Higiene y Medicina Tropical y el Instituto de Salud Infantil de la “University College London”. Muestra que los padres de los niños obesos pueden no ser capaces de reconocer que su hijo tiene sobrepeso, a menos que se encuentre en niveles muy extremos.

Este trabajo indica que las familias de raza negra son más propensas a subestimar el peso de sus hijos. Ocurre lo mismo en los ambientes más desfavorecidos o en el caso de ser niños, en lugar de niñas. Esta investigación ha sido publicada en la revista “British Journal of General Practice”.

Los autores sugieren que muchos padres no pueden identificar que su hijo tiene sobrepeso. Esto podría cuestionar la efectividad de las medidas actuales de salud pública para luchar contra la obesidad en el hogar.

El equipo de investigación analizó la magnitud de este problema adicional e identificó los factores socioeconómicos que pueden predecir la sobreestimación o subestimación por parte de los padres del peso de sus hijos. Los padres de 2.976 niños respondieron a un cuestionario. Un 31% (915 padres) subestimaba el Índice de Masa Corporal (IMC) de su hijo ubicado en las escalas gubernamentales de obesidad, que clasifican a los niños en las categorías de sobrepeso (u obesidad), exceso de peso, peso saludable o bajo peso.

Vieron, además, que sólo cuatro padres describieron a su hijo como muy obeso a pesar de que 369 niños fueron identificaron oficialmente con este problema. De acuerdo con las directrices oficiales, los niños son clasificados con sobrepeso cuando están en el percentil 85 y mucho sobrepeso (u obesidad) en el percentil 95.

El autor principal, Sanjay Kinra, profesor adjunto en Epidemiología Clínica en la Escuela de Londres de Higiene y Medicina Tropical y coinvestigador principal del ensayo PROMISE, señaló que “si los padres no son capaces de clasificar con precisión el peso de su propio hijo, puede que no estén dispuestos o motivados a promulgar los cambios en el entorno del niño que promueven el mantenimiento del peso saludable".

El coautor Russell Viner, pediatra académico en el Instituto UCL de Salud Infantil e investigador de PROMISE, explicó que “ahora pueden ser necesarias medidas que disminuyan la brecha entre las percepciones de los padres del estado del peso y las escalas de obesidad infantil utilizadas por los profesionales de la medicina. El objetivo debe ser ayudar a los padres a entender mejor los riesgos de salud vinculados con el exceso de peso y aumentar los estilos de vida más saludables".

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