Actividades para discapacitados en Valdelasfuentes

Ocio, salud y deporte son las señas de identidad de la Ciudad Deportiva Valdelasfuentes de la localidad madrileña de Alcobendas. Además, se trata de una instalación accesible y sin barreras para los discapacitados, lo que facilita la igualdad en el acceso a la práctica deportiva.

Los usuarios pueden acceder a los grupos de ejercicio físico adaptado después de pasar un reconocimiento por parte del Servicio Médico. Este servicio sigue un modelo multidisciplinar formado por médicos, enfermeros, fisioterapeutas y técnicos deportivos que se encarga de valorar al interesado y estimar el ejercicio que puede realizar.

Según el reconocimiento clínico inicial, se le deriva a los diferentes programas impartidos por los técnicos deportivos. Además, el Servicio Médico llevará a cabo un seguimiento del discapacitado y supervisará cualquier cambio. Mientras los médicos gestionan el informe, los técnicos deportivos se ocupan del contacto directo y de realizar el programa acordado.

La piscina es la infraestructura donde más obstáculos físicos se eliminan. Según los profesionales del centro, el medio acuático iguala a todos a la misma condición. El agua resta peso y permite facilidades en los movimientos, otorgando una mayor independencia a pesar de sus limitaciones. Por ello, el Patronato Municipal de Deportes ha dotado a la piscina de Valdelasfuentes de una silla anclada y otra móvil con el objetivo de que se desenvuelvan de manera autónoma. Los usuarios con menos movilidad pueden acceder a una silla móvil.

Asimismo, las piscinas están estructuradas en distintos niveles de profundidad. Ésta es otra característica que hace posible el acceso sin barreras a la actividad deportiva.

Además de estos medios, en las clases se hace uso del material básico de piscina, que puede ser adaptado en función de las necesidades del grupo. Los cinturones de flotación o collarines cervicales se emplean habitualmente.

Y del agua a la zona seca. La sala fitness es otra instalación que forma parte del conjunto de infraestructuras especialmente adaptadas para estos colectivos. Esta parte del gimnasio es conocido como “la línea de la discapacidad”. Su uso es más limitado que el de la piscina, puesto que el Servicio Médico sólo lo aconsejará para aquellos usuarios que dispongan de un grado medio de movilidad e independencia.

En esta sala, los discapacitados pueden acceder a un gran número de aparatos con una base móvil que les permiten disponer del espacio necesario para acceder con su silla. De esta forma, los interesados pueden hacer uso de máquinas elípticas y de cintas para correr. Además, los discapacitados visuales parciales pueden manejar fácilmente las opciones de las máquinas gracias al relieve de los botones.

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