Una mala salud cardiovascular produce mayor deterioro cognitivo

La Asociación Americana del Corazón realizó un estudio sobre las consecuencias del sedentarismo. Indica que las personas con mala salud cardiovascular tienen mayor incidencia de deterioro cognitivo, especialmente de aprendizaje y memoria.

La investigación también señala que los hombres y quienes poseen una educación superior, así como mayores ingresos, tienen mejor salud cardiovascular. Mientras tanto, la incidencia de la discapacidad mental se detecta más habitualmente en personas con menores ingresos, aquellas que padecen una enfermedad cardiovascular.

La salud cardiovascular desempeña un papel crítico en funcionamiento del cerebro, con varios factores de riesgo que provocan una mayor propensión a sufrir problemas cognitivos. Los investigadores hallaron que las personas con las puntuaciones de salud cardiovascular más bajas tenían más probabilidades de mayor deterioro en el aprendizaje, la memoria y las pruebas de fluidez verbal que personas con perfiles de riesgo intermedio o mejores.

En el estudio participaron 17.761 voluntarios de más de 45 años con una función cognitiva normal y sin historial de accidente cerebrovascular, Cuatro años después se les evaluó su función mental. Los especialistas usaron datos del “Reasons for Geographic and Racial Differences in Stroke Study, REGARDS” que determinó el estado de salud cardiovascular basándose en un sistema de puntuación de la Asociación Americana del Corazón.

Éste sistema mide los beneficios de los comportamientos de salud modificables y factores de riesgo en la salud cardiovascular, como tabaquismo, dieta, actividad física, índice de masa corporal, presión arterial, colesterol total y glucosa en ayunas. Tras tener en cuenta las diferencias de edad, sexo, raza y educación, los investigadores identificaron un peor estado cognitivo en el 4,6 % de las personas con las peores puntuaciones de salud cardiovascular, el 2,7 % de los participantes con los perfiles de salud intermedios y el 2,6 % de los aquellos que se encontraban en la categoría de mejor salud cardiovascular.

El autor principal de este trabajo, Evan L. Thacker, (Brigham Young University, Utah) manifestó que “incluso cuando no se puede tener una salud cardiovascular ideal, es mejor mantener niveles intermedios para contar con una mejor función cognitiva. Éste es un mensaje alentador, porque la salud cardiovascular intermedia es un objetivo más realista y fácil de alcanzar para muchas personas”.

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