Acceso Club
Domingo,
08/12/2024
Andalucia Aragón Asturias Baleares C. La Mancha C. y León Canarias Cantabria Cataluña Ceuta Extremadura Galicia La Rioja Madrid Melilla Murcia Navarra País Vasco Valencia
Antonio Rivero, profesor de la Universidad Politécnica de Madrid

30/08/2022

Política y comienzos deportivos

Política y comienzos deportivos Ya avanzamos en anteriores artículos publicados que hubo tres sectores profesionales que protagonizaron la implantación del deporte en España: docentes, médicos y militares. Pero también, desde otros ámbitos de influencia, los políticos y los periodistas estuvieron presentes en este proceso. En esta ocasión nos vamos a referir a los primeros.

Podemos decir que desde finales del XIX y durante las primeras décadas del siglo XX la acción de la política en el fomento de la gimnástica y de la práctica deportiva fue siempre discontinua, poco decidida y, en general, débil. A título individual, fueron muchos los políticos que se manifestaron favorables a la actividad física, pero sus acciones concretas desde la política oficial dejaron, por el contrario, bastante que desear.

Dos eran, igualmente, las condiciones esenciales para que los gobiernos pudieran realizar una labor destacada en el campo de la actividad física. La primera, tener como objetivo en su programa político el desarrollo físico de la población; la segunda, disponer de medios para llevar a cabo proyectos deportivos. En España no hubo ni lo uno ni lo otro: Ni partidos interesados en la actividad física de la población, ni capacidad económica para su promoción, lo que terminó por provocar entre los profesionales de la educación física y los amantes del deporte una reacción general de descontento.

Así se explicaba la situación en el artículo “Deportes Universitarios” desde la revista deportiva Gran Vida  en el año 1925:

“Dicen que cada pueblo tiene el gobierno que se merece; pero esta sentencia resulta demasiado injusta por lo que respecta a España. En el deporte, por ejemplo, vemos el desarrollo enorme que toma en nuestros jóvenes, que lo practican con extraordinario entusiasmo y éxito; pero siempre dentro de la esfera de la iniciativa privada, sin la menor organización por parte del Estado. Es decir, que el deporte en España, mirado desde el punto de vista del súbdito, del ciudadano, es, dentro del mérito relativo, de los primeros del mundo, al menos por su entusiasmo; pero observado desde el del Estado, nuestra posición es de las últimas, si no la última del mundo. No sabemos que ninguna Universidad española tenga un mal campo de deportes. Sólo en esfera más limitada, tenemos el Instituto escuela, en donde un ex ministro liberal, muy avezado al estudio de las organizaciones extranjeras, cuyo nombre es prudente callar, supo darle un espíritu, una orientación y una organización verdaderamente europeos”.

El descuido del deporte y del desarrollo físico de la población por parte de las autoridades no debió ser mayor que el que existió para con otras necesidades sociales igualmente. La regeneración física apareció como un objetivo secundario. Desde los tiempos de Manuel Becerra, cuando se  aprobó la primera Lay de Educación Física (1883), la legislación española en la materia no avanzó absolutamente nada, pues cuando hubo legislación y disposiciones favorables, nunca hubo presupuestos para implantarlas.

Entre 1910 y 1936 nunca se llegó a impartir correctamente una Educación Física digna y eficaz, ni en la enseñanza pública ni en la privada.

Durante la dictadura de Primo de Rivera, se intentó que el garante de la ordenación e implantación de la educación física en toda España fuera el ejército, mediante la Escuela Central de Gimnasia. La dictadura, por tanto, pretendió que la influencia militar en la educación física fuera decisiva y que aglutinase todos los esfuerzos implantándose la cartilla escolar. Pero, como ya ha quedado dicho, nada de esto sería posible.

Entre 1923 y 1930, la actividad deportiva se multiplicó en España, se construyeron estadios, la prensa dedicó numerosos espacios al deporte, pero podemos constatar que el papel oficial de la Educación Física escolar ante aquel notable fenómeno social fue mínimo. Aún el nuevo régimen, la II República, proclamada el 14 de abril de 1931, optaría por partir de cero y empezar de nuevo.

En 1932 Manuel Azaña, entonces jefe del gobierno, hizo al periódico deportivo As, unas declaraciones significativas: 

“La educación física de la juventud –dijo– constituye una de las preocupaciones del Gobierno, que considera que la extensión del hábito deportivo es la base de toda política sanitaria. Tan sólo mediante el cultivo racional del músculo puede lograrse una juventud robusta que permita, con probabilidades de éxito, la lucha contra las enfermedades endémicas que minan la sociedad actual. Las asociaciones y federaciones deportivas deben de olvidar un poco el deporte espectáculo para preocuparse del deporte función social. Deben sobreponerse al interés del club para atender al interés general, y puestos en contacto con las instituciones de la Instrucción Pública y Sanidad, y prestando su ayuda a las organizaciones obreras, pueden contribuir poderosamente al mejoramiento físico de la raza. Es indudable la necesidad de crear terrenos deportivos suficientemente dotados, accesibles a todos los ciudadanos. Pero el Estado poco puede hacer en esta cuestión. Son los municipios principalmente, quienes deben atender a la satisfacción de esa necesidad”.

Pero desgraciadamente no se cumplieron las expectativas.

La Educación Física española, desde sus orígenes hasta el estallido de la guerra civil, en 1936, se vio siempre perjudicada y víctima de una política educativa errática, al socaire de los cambios de gabinete. En cuanto a la creación de infraestructuras para las prácticas del deporte y el ejercicio físico de la sociedad sucedió lo mismo. De ahí el atraso del deporte español a excepción del fútbol y el boxeo, deportes profesionales  y considerados como espectáculos de masas.

Antonio Rivero, profesor de la Universidad Politécnica de Madrid

Blogs Otros Articulos
 
Comentarios
No existen comentarios aún para esta noticia.
Envia a un amigo
De
Para (Email)
Dedicatoria
   
Deportistas Nº 103

Munideporte.com | Copyright 2011: Equipo de Gestin Cultural, S.A. Todos los derechos reservados
HSNET , patrocinador tecnolgico de Munideporte